El cómo crear un naming de marca no es tarea difícil, pero sí es un proceso importante si quieres que el posicionamiento de tu negocio tenga el resultado que tanto quieres. Aprenderás a cómo tener esas directrices a través de nuestros consejos muy útiles.
“Tener un buen nombre de marca” y “qué implica”, son dos puntos fundamentales que hoy tocaremos, el naming va de la mano con el branding.
El naming o nombre de marca es el título creado para representar un determinado producto o servicio de tu empresa, en pocas palabras, es el proceso que te ayudará con el desarrollo básico de trabajar los valores que se hayan asignado en tu empresa.
Tratándose de la identidad de una marca, es importante recordar que más allá de realizar un naming creativo, ¡Te estás adentrando en un maravilloso proceso analítico! Como referencia gráfica, lo dividimos en un 80% analítico y el 20% creativo.
¿Cuál es la importancia de tener un buen nombre de marca? ¡Es tu primer elemento de identidad! Sumamente fundamental, viene a ser como el pulmón y oxígeno de tu corporación, sin ella, básicamente no existes.
Un naming puede tener alta influencia en las acciones de tu público objetivo gracias a la conexión que entre ellos nazca por una necesidad o identificación; la importancia del naming radica en destacar y en evocar un concepto:
“sensaciones o la presentación de tu historia”.
El nombre de tu corporación debe contener un significado estratégico; ciertos pasos ayudan al proceso de hacerla reconocible y consistente, pasos que te mencionaremos más adelante.
Como ejemplo, de seguro te debe resultar familiar estas marcas: Google, Coca-Cola, Amazon, Disney, VISA, Facebook o Starbucks.
El naming debe estar cargado de significado y transmitir confianza.
Todos sabemos qué representan estas marcas mencionadas, qué son y qué participación (o no) tienen en nuestra vida. Para los nombres de marcas hay dos tipos de tendencias:
- Creación de un nombre distintivo.
- Creación de un nombre descriptivo.
Es en este segundo punto donde nos detendremos, el problema principal no es crear una marca con el nombre que se te ocurra, sino ser realmente auténticos, ¡Distintivo!
En la tendencia descriptiva, por ejemplo, usaremos el nombre de: “Escuela de nutrición” para una marca, pero, si nos detenemos a analizar… ¿Cuántas escuelas no habrá iguales de la misma especialidad, en la misma ciudad, país o en todo el mundo?
Ten un nombre que no describa tanto lo que haces, sino que te distinga del resto de la competencia.
Los nombres distintivos tienen como ventaja que tu marca sea única, que sólo te represente a ti, y gracias a este tipo de nombres tu naming no se prestará a confusión con otras identidades corporativas.
Ten en tu objetivo, como nivel creativo, el transmitir sensaciones, historias y emociones específicas a tu target. Existen distintos tipos de naming que hoy tendrás el gusto de conocer.
Mencionaremos 4 categorías principales para el nombre de tu marca. ¡Comencemos!
Tipos de naming
En esta sección hablaremos más al detalle sobre el nombre descriptivo. Queremos aclarar que no es una prohibición el tener uno con esa característica, pero sí es importante ser muy suspicaces y cuidadosos al momento de seleccionar el nombre de tu marca.
Nombres descriptivos
El inconveniente de los naming descriptivos, es que pueden resultar un tanto restrictivos, por eso hay que saber elegir bien.
Debes tener en cuenta también que los nombres quienes siguen este proceso descriptivo pueden verse afectados en la credibilidad de la marca cuando nace una extensión a otras categorías.
Sin embargo, en general, si quieres aventurarte en la selección de tu nombre de marca con esta categoría, obtendrás un resultado.
¿Cuál? Para tu público objetivo resultará un poco más sencillo elegir o identificar tus servicios o productos ya que se asocian fácilmente con los beneficios que proyectan. Aclaramos que…
“En las referencias visuales que verás a continuación, respetamos los derechos de autor“.
Estas marcas que ves con la categoría descriptiva han sabido adaptarse con sus nombres a sus distintos mercados.
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- ¡Acrónimos!
Los acrónimos son las abreviaturas de un nombre descriptivo. Hoy en día, muchas de las marcas más populares en el mundo crearon su nombre por medio de un proceso naming basado en acrónimos, por ejemplo: HP e IBM.
Un acrónimo puede ser sencillo de seleccionar y decidir, de recordar o de pronunciar. Por ejemplo, es menos complejo decir “AFLAC” que “American Family Life Assurance Company”.
Sin embargo, la desventaja de un acrónimo es que le falta esa chispa cargada de vida y significado porque no proviene de un idioma en específico.
Para tener un nombre con esta categoría, habría que hacerse la pregunta de si comunica o no la historia que deseas contar.
Gran parte de los naming con acrónimos pueden evolucionar partiendo de nombres funcionales; ya sea de forma orgánica o deliberada. La identidad de tu empresa con un nombre descriptivo sí puede tener esta oportunidad de progresar.
Nombres abstractos
Los nombres inventados son muy poderosos ya que no traen consigo un historial o antepasado, no se encuentran ensuciados con significados ajenos de otras marcas que sean positivas o negativas.
Tener un nombre abstracto también requiere de cuidado y estrategia, debes saber que estos nombres son envases vacíos como representación de una marca, su éxito dependerá de la misma marca con los valores y significados que le otorgues.
Las marcas con naming abstractos están basados en aquellos nombres poéticamente elaborados. ¿Un ejemplo de esto? Twitter y Kodak
Nombres sugerentes
Este tipo de nombres, también conocidos como “los distintivos”, son construidos ante sensaciones y experiencias que tu marca proyecte, además, ayudan de manera efectiva a su posicionamiento y reconocimiento porque crean un vínculo a raíz de una conexión con el público objetivo.
Los nombres sugerentes permiten destacar tu empresa en el mercado porque crean esa expectativa del “por qué” debo elegirlos.
¿Cuál sería el obstáculo? Lograr la conexión con el significado de tu marca, se necesitaría una profunda conexión del negocio y su representación antes de iniciar el proceso de naming.
Para que no haya confusiones, te vamos a mencionar cuáles son esas características que tu naming debe tener, de esta manera, sabrás cual puede ser el indicado:
Características del naming
- Apariencia: “¿Cómo se ve el nombre impreso, luce tan bien como suena?”.
- Expresión: “El nombre seleccionado debe ajustarse a la personalidad de tu marca”.
- Distintivo: “El nombre debe destacarse entre la competencia”.
- Sonoridad: “Debe ser sencillo de recordar, pregúntate si es poético y cómo suena”.
- Recuerdo: “Pregúntate como consumidor si es fácil de recordar”.
Ahora que ya sabes cuáles son las características del naming, vamos a mostrarte y mencionarte de forma breve pero efectiva, cuáles son los pasos para crear un buen naming de marca.
Tips para crear un naming de marca
Gracias a estos pasos podrás filtrar, apuntar y segmentar al naming que mejor se acople con la marca que quieres construir.
- Define los principales atributos de tu producto.
- Determina la promesa de tu marca: “el beneficio para tus consumidores”.
- ¡Mapea a la competencia! Analiza el entorno de la competencia de tu empresa.
- Define la categoría de tu producto o servicio.
- Piensa en un buen nombre y fíltralos tomando en cuenta los atributos y beneficios de la marca.
- Clasifica tu nombre según su categoría: “descriptivo, sugerente, abstracto o acrónimo”.
¡Te damos un plus! No olvides que el nombre debe coincidir a su 100% con la marca que vas a construir: sus valores, personalidad, atributos o beneficios.
Garantizamos que estos tips ayudarán a definir y filtrar tu naming ideal, además, te ayudarán con la definición de la plataforma estratégica de tu negocio.
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